En el trabajo, pasamos muchas horas conviviendo con diferentes personas, por lo tanto, es importante tomar en cuenta que se mezclan diversas personalidades, formas de trabajo y valores, lo cual puede generar un sinfín de conflictos.
Tipos de conflictos en una empresas
De relación: son conflictos que no afectan la estructura organizativa, las relaciones jerárquicas y los recursos o actividades del personal.
Estratégicos: este tipo de problemas sí afectan la estructura, jerarquía, recursos o actividades de todo personal.
Intrapersonales: son los conflictos que un individuo tiene consigo mismo.
Interpersonales: son aquellos que se generan entre dos o más personas.
Intragrupales: estos conflicto se refieren a aquellos que se originan entre un equipo de trabajo o departamento.
Intergrupales: se presentan entre diferentes áreas o departamentos de la empresa.
Organizacionales: se desarrollan entre personas, grupos o departamentos de una empresa.
De información: se generan debido a la generación de información falsa, falta de comunicación o diversos puntos de vista entre los empleados.
De intereses: nacen de las diferentes necesidades, las cuales pueden ser percibidas de forma errónea como la diversificación de las tareas, recursos, dinero, equipos, entre otros.
Estructurales: se generan por la propia estructura jerárquica, roles, desigualdad de tomas de decisiones, acceso a los recursos, entre otros.
Tipos de conflictos en una empresas
De relación: son conflictos que no afectan la estructura organizativa, las relaciones jerárquicas y los recursos o actividades del personal.
Estratégicos: este tipo de problemas sí afectan la estructura, jerarquía, recursos o actividades de todo personal.
Intrapersonales: son los conflictos que un individuo tiene consigo mismo.
Interpersonales: son aquellos que se generan entre dos o más personas.
Intragrupales: estos conflicto se refieren a aquellos que se originan entre un equipo de trabajo o departamento.
Intergrupales: se presentan entre diferentes áreas o departamentos de la empresa.
Organizacionales: se desarrollan entre personas, grupos o departamentos de una empresa.
De información: se generan debido a la generación de información falsa, falta de comunicación o diversos puntos de vista entre los empleados.
De intereses: nacen de las diferentes necesidades, las cuales pueden ser percibidas de forma errónea como la diversificación de las tareas, recursos, dinero, equipos, entre otros.
Estructurales: se generan por la propia estructura jerárquica, roles, desigualdad de tomas de decisiones, acceso a los recursos, entre otros.